El turismo rural catalán mejora en cuanto al número de visitantes, pero sigue mostrando ciertos problemas en cuanto a pernoctaciones y al grado de ocupación. Es lo que destaca la última Encuesta de Ocupación en Alojamientos de Turismo Rural, del Instituto Nacional de Estadística (INE).

En el mes de mayo, más de 38.000 viajeros eligieron un alojamiento rural del territorio catalán, cuando en mayo de 2018 fueron algo más de 36.600. Este incremento interanual es de un 4,1%.

Sin embargo, el número total de pernoctaciones ha sido inferior, tal y como se desprende de esta encuesta. A pesar de tener cifras similares en cuanto a las pernoctaciones -en torno a 75.000- ha habido un descenso interanual del 0,6%.

Esto se debe principalmente al descenso en el grado de ocupación, donde se ha registrado un 13,3%, un 0,3% menos que en el año anterior. Más notorio ha sido el descenso en la tasa de ocupación durante los fines de semana, donde se ha pasado de un 38,3% a un 34,6%.