Recientemente, la ciudad de Almagro fue incluida dentro de la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España.
A pesar de constar como ciudad, Almagro se encuentra en una lista de pueblos. ¿A qué se debe esto? Sencillamente porque la posibilidad de entrar en dicha asociación no depende de su “estatus”, tal y como sucede con la localidad de Frías (en Burgos), si no porque se trata de un municipio que cuenta con menos de 15.000 habitantes, tal y como indica en sus bases dicho organismo para considerarse “pueblo” o “municipio pequeño”.

Fotografía: Marc

Resuelta esta duda, tenemos que trasladarnos a Almagro para saber cuáles son los encantos de esta localidad.
Para conocer la importancia de Almagro hay que remontarse hasta el siglo XIII, momento en el que se le concedió un fuero a la villa. Es entonces cuando los maestres de la Orden de Calatrava establecen ahí su residencia y gobierno. Dos siglos más tarde, Almagro era una villa fortificada y punto clave de la Reconquista.

Su época de mayor esplendor fue a mediados del siglo XVIII, cuando Almagro llegó a convertirse en la capital de La Mancha. Tras perder su capitalidad, se le concedió el título de ciudad, por el cual se reconoce actualmente
Los recuerdos de esta historia aún siguen vigentes, como son los Palacios de los Marqueses de Torremejía, Condes de Valparaíso o Fúcares, aunque el mayor reconocimiento que obtiene Almagro es gracias a su teatro.

Declarado como Monumento Nacional hace 60 años, el teatro de Almagro es el único corral de comedias del siglo XVII que está perfectamente conservado. De hecho, sigue siendo un referente cultural del teatro a nivel nacional e internacional debido a las representaciones que se siguen realizando en este teatro.

Gracias a la restauración de la Plaza Mayor y el Ayuntamiento, la ciudad de Almagro es posteriormente declarada Conjunto Histórico-Artístico.