El turismo rural en el Parque Natural de la Sierra de Grazalema ha sufrido un duro revés en el mes de noviembre, tal y como constata el Instituto Nacional de Estadística (INE) y su encuesta de ocupación de alojamientos de turismo rural.
Fotografía de cabecera: Benjamin Núñez González
Este mes, el número de viajeros “rurales” ha sido de 1.692. Sin embargo, el año pasado, durante este mes, fueron 1.909, con un descenso interanual del 11,4%.
El descenso en las pernoctaciones ha sido todavía mayor. En noviembre de este año, se han registrado 3.667 pernoctaciones. Esta cifra es muy inferior a la cosechada en noviembre de 2018, cuando se registraron 4.257 pernoctaciones, lo que significa un descenso interanual del 13,9%.
El turista permaneció en el alojamiento rural una media de 2,17 días, lo que implica una estancia media menor que en la misma fecha de 2018, cuando el promedio de la estancia llegó a los 2,23 días.
Esto implica que la tasa de ocupación también ha sido menor. En todo el mes de noviembre, el grado de ocupación ha sido del 10,4%, mientras que en el año 2018 fue de un 12,7%.
En los fines de semana, el descenso ha sido también importante, pasando de un 32,8% registrado en noviembre de 2018 a un 24,1%. Así, la caída del grado de ocupación en los fines de semana ha sido de un 8,7%.
Los datos de noviembre sobre el turismo rural de la Sierra de Grazalema, obtenidos de la Encuesta de Alojamientos de Turismo Rural del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestra datos provisionales, a falta de confirmar en meses venideros.
