Salamanca ha sido una de las muchas provincias que ha visto como el turismo rural ha descendido en el mes de diciembre, tal y como reflejan los datos de la encuesta de ocupación de los alojamientos de turismo rural del Instituto Nacional de Estadística.

Fotografía de cabecera: Luis Rogelio

Durante este período, 8.500 personas optaron por hospedarse, al menos una noche, en un alojamiento rural. Esta cifra es inferior al número de viajeros de diciembre del año pasado, cuando fueron 8.800 los viajeros que optaron por esta opción. Es decir, un 3,3% menos que en 2018.

El número de pernoctaciones ha sido mucho menor. Así, en el presente mes de diciembre se han registrado 21.000 pernoctaciones, un 0,3% menos que en 2018

La diferencia entre pernoctaciones y viajeros ha venido determinada por el aumento de la estancia media del turista. Este mes de diciembre, la estancia media ha sido de 2,46 días, mientras que en 2018 fue de 2,38.

La tasa de ocupación en los alojamientos de Salamanca en todo el mes de diciembre ha sido del 16,6%. Se trata de un 1,5% más que en 2018, cuando se registró un grado de ocupación del 15,1%.

El aumento ha sido significativo en el grado de ocupación de los alojamientos rurales en los fines de semana, pasando de un 27,7% a un 38,9%. Con ello, el incremento ha sido del 11,2%.

518 alojamientos rurales estuvieron abiertos en el mes de diciembre en la provincia de Salamanca. Son 24 menos que los establecimientos que abrieron sus puertas en el mismo mes del año anterior.

A la hora de referirnos al personal empleado en el turismo rural de Salamanca en este mes, es necesario recalcar el importante ascenso del mismo, comparándolo con el mismo período del año anterior. Este mes, 702 personas han trabajado directamente para este sector, un 2,2% más que en 2018, cuando ascendió a un total de 687 empleados.

Tanto el grado de ocupación, como el registro de pernoctaciones y viajeros que muestra el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el mes de diciembre, muestra datos provisionales.