La celebración de la Semana Santa este año, en el mes de abril, ha espoleado el turismo rural de Castilla-La Mancha. Al menos, esto es lo que indican los datos emitidos por la Encuesta de Ocupación de Alojamientos de Turismo Rural, del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Según estos datos, un total de 27.000 personas se alojaron en una casa rural durante este mes. La cifra es muy superior a la del año pasado, cuando 24.000 viajeros optaron por esta opción. Esto supone un incremento interanual del 12,2%.

En cuanto al número de pernoctaciones, el incremento también ha sido notorio. Así, en abril de este año se han superado las 63.000 pernoctaciones, mientras que en abril del año pasado se superaron las 50.000, con un incremento del 25,5%.

De esta manera, es más que evidente que también se ha incrementado el grado de ocupación de los alojamientos rurales de Castilla-La Mancha. Durante todo el mes de abril, el grado de ocupación fue del 14,3%, un 2,8% más que en 2018, mientras que en los fines de semana ha sido de un 33,7%, un 2% más.