La Semana Santa es uno de los períodos que el turismo rural espera con ansias y su influencia se nota claramente en los datos de ocupación. Si se celebra en marzo o en abril, marca una gran diferencia en este tipo de datos. En Galicia, se ha notado de forma drástica el hecho de que este año se celebrar en abril y no en marzo, a tenor de los datos interanuales que ha mostrado el Instituto Nacional de Estadística (INE), con su Encuesta de Ocupación de alojamientos de Turismo Rural.

El número de viajeros que optaron por un alojamiento rural en Galicia se acercó a 8.500. Una cifra muy lejana de los datos obtenidos en marzo de 2018, cuando lo hicieron un total de 12.300 viajeros. Es decir, con un descenso interanual del 31,1%.

Las pernoctaciones en alojamientos de turismo rural también sufrieron un duro revés. Mientras en marzo de este año se han registrado un total de 14.000, en el mismo período del año pasado fue de 21.100, lo que denota un descenso del 39,2%.

En lo que respecta a la ocupación media de los alojamientos, este mes de marzo se ha alcanzado un 8,3% durante todo el mes, alejado del 12,3% de marzo de 2018, con un descenso todavía mayor en las tasas de ocupación del fin de semana, pasando de un 20,6% a un 16,3% en este mes.