Sí, no sólo es posible, es que desde el año 2018 existe una credencial canina para aquellos perros que realizan la peregrinación hacia Santiago de Compostela, la Perreginra o Compostela Canina. Es algo que se agradece, ya que son muchos los peregrinos que deciden llevar a su animal de compañía dadas las grandes ventajas de hacer el Camino de Santiago con perro. Ahora bien, es importante tener en cuenta que en este caso no viajamos solo y que, además, viajamos con un animal que depende única y exclusivamente de nosotros. Debemos cuidarlos al máximo.
Cuidados durante el Camino de Santiago
Perros sueltos o con correa
Es una de las mayores dudas a la hora de realizar el Camino de Santiago con perros. Lo cierto es que la recomendación es no hacerlo ni en un extremo ni en otro. Es decir, lo suyo es ir alternando ambas opciones.
Durante las diferentes etapas vamos a encontrarnos zonas en las que podremos dejar que nuestro amigo peludo pueda correr sin ningún tipo de peligro, pero muchas otras tendrá que ir más controlado. Apliquemos pues el sentido común.
Durante los primeros días, eso sí, se recomienda atarlo con más asiduidad para que se acostumbre, pues podría empezar a correr sin control y cansarse demasiado pronto.
La comida del perro durante el camino
Lo mejor sería intentar variar lo menos posible la dieta del animal durante el recorrido. Lo que sí hay que hacer es aumentar la ración de comida, pues es el esfuerzo que realizan los animales es mayor.
Si nos encontramos con que nuestra mascota no quiere comer nada, debido principalmente al cansancio, podemos comprar refuerzos alimenticios y suministrárselo en el momento en el que paremos a comer.
Se recomienda dar el pienso con lata de comida húmeda para dar mayor aporte energético y suplementos nutricionales, pero estos últimos debemos consultarlos siempre con el veterinario antes de comprarlos para saber cuáles son los más indicados.
Cuidado con la hidratación
Como podemos imaginar, la hidratación ese esencial. No es algo que debamos dejar al azar, como no lo haremos tampoco con nosotros. Debemos ir rellenando su bebedero cada vez que nos hidratemos nosotros.
Refresca e hidrata a tu perro constantemente para prevenir golpes de calor. En este punto, hay que señalar que muchos caminos discurren cerca de ríos o zonas con agua que podrían ser muy adecuadas para transitar con perros. Busca siempre la mejor opción.
Las almohadillas
Las almohadillas de los perros deben estar siempre bien hidratadas. Es importante que todas las noches, antes de dormir, les apliquemos una crema específica para que puedan estar listos para una nueva etapa.
También hay calzado animal que pueden llevar cuando atravesemos asfalto u hormigón que pueden dañar las almohadillas de nuestro animal si recorren largas distancias por ellos.
Revisa todos los días las patas de tu perro por si aparecen rozaduras y fíjate, sobre todo, en el quinto dedo, ya que suele ser el que más sufre con las botas caninas. Si se ve afectado, deberemos dejar de usar estos accesorios durante los días que tarde en recuperarse la herida.