Noviembre no ha sido un buen mes para el turismo rural de Castilla Y León. Eso es lo que reflejan los datos del a encuesta de ocupación de los alojamientos de turismo rural, emitido por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Fotografía de cabecera: Nicolás Pérez
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Estos datos muestran cómo se redujo el número de turistas que eligieron un alojamiento rural para pasar, al menos, una noche. En total, más de 60.000 viajeros eligieron esta opción en noviembre, lejos de los más de 62.000 de noviembre de 2018. Esto supone un descenso del 2,8% en número de viajeros con respecto al mismo mes del año anterior.
El descenso ha sido importante en cuanto al turismo nacional. El número de viajeros nacionales ha ascendido a 58.000, un 3,4% menos que en 2018, cuando fueron un total de 60.000.
Por el contrario, 2.200 fueron los viajeros no residentes en España los que apostaron por el turismo rural en Castilla Y León en el mes de noviembre. Se trata de un 17% más que en el mismo período de 2018, cuando fueron más de 1.900.
El descenso en las pernoctaciones también ha sido constatable. En noviembre de este año, se han registrado un total de 122.000 pernoctaciones. Esta cifra es inferior a la cosechada en noviembre de 2018, cuando se registraron 127.000 pernoctaciones, lo que significa un descenso interanual del 4,4%.
117.000 de estas pernoctaciones fueron de turistas de carácter nacional. Esta cifra dista mucho del registro de pernoctaciones del año anterior. El descenso en este tipo de pernoctaciones ha sido de un 5,5%, puesto que en noviembre 2018 se registraron 124.000 procedentes de turistas nacionales.
El turismo rural de Castilla Y León ha aumentado en lo que respecta a pernoctaciones de viajeros extranjeros, tal y como recalca la encuesta de este mes de noviembre, con 4.200 pernoctaciones. En noviembre del año pasado, fueron 3.000 pernoctaciones de este tipo, las que se registraron. Por lo tanto, el incremento interanual ha sido del 39,9%.
El turista permaneció en el alojamiento rural una media de 2,02 días, lo que implica prácticamente el mismo tiempo de estancia que en la misma fecha de 2018, cuando el promedio de la estancia llegó a los 2,06 días.
Por otro lado, el descenso se ha hecho notar en el grado de ocupación en los alojamientos rurales de Castilla Y León. Este mes de noviembre, el grado de ocupación ha sido de un 13%, un 0,4% menos que en 2018.
Durante los fines de semana, el descenso ha sido importante, pasando de un 33,4% de ocupación a un 31,4% en el presente mes de noviembre, por lo que el descenso interanual ha sido de un 2%.
Acerca de la oferta de los alojamientos rurales de Castilla Y León en el mes de noviembre, ha habido un retroceso de los establecimientos ofrecidos, en comparación con el año pasado. Este mes, han sido un total de 3.551, 92 menos que el año pasado.
Sin embargo, 4.798 personas han trabajado directamente para los establecimientos rurales de la comunidad en este mes. Se trata de un aumento leve, ya que en el mes de noviembre del año anterior fueron un total de 4.763 personas las que trabajaron para el sector del turismo rural, lo que nos indica un crecimiento interanual del 0,7%.
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Los datos sobre el turismo rural de Castilla Y León en el mes de noviembre son provisionales, tal y como especifica la Encuesta de Alojamientos de Turismo Rural, emitida por el Instituto Nacional de Estadística.
